www.som360.org/es

Consejos para cuidar más nuestra salud mental positiva

Es igual de saludable reír y estar contento cuando están pasando cosas buenas, que llorar y estar triste cuando se presentan problemas
M.Teresa Lluch
Dra. María Teresa Lluch Canut
Catedrática de Enfermería Psicosocial y Salud Mental. Facultat de Medicina i Ciències de la Salut
Universitat de Barcelona
Salud mental positiva

Estamos viviendo un momento histórico desde que la Organización Mundial de la Salud declaró, el 11 de marzo del 2020, la COVID-19 como pandemia mundial. Han pasado ya unos meses y la realidad es que esta situación está generando un impacto en toda la sociedad y a todos los niveles: económico, social, físico y emocional. Sin duda, está teniendo un impacto en nuestra salud mental.

En este inicio del año en el que siempre se plantean buenos propósitos y deseos, es interesante hablar de la salud mental positiva. ¿Qué es y cómo podemos trabajarla? ¿Nos puede ayudar a mantener un equilibrio mental saludable?

La Organización Mundial de la Salud (OMS, 2001) estableció que una persona goza de salud mental positiva si puede desarrollar sus propias capacidades, puede afrontar los estresores normales de la vida, puede trabajar productivamente y con satisfacción, y es capaz de participar y aportar a la comunidad.

¿Qué es la salud mental positiva?

En la línea de la definición de salud mental positiva de la OMS, hace unos años propuse una forma de definir la salud mental positiva a partir de un modelo multifactorial e interrelacionado. Este modelo ayuda a los profesionales de la salud a valorar si la persona vive su salud mental de forma positiva:

  1. Satisfacción personal: hace referencia a la satisfacción con uno mismo (autoconcepto / autoestima), con la vida personal que uno tiene y con las perspectivas de futuro.
  2. Actitud prosocial: incluye la sensibilidad de la persona hacía su entorno social, la actitud y el deseo de ayudar o apoyar a los demás y la aceptación de los demás y de los hechos sociales diferenciales.
  3. Autocontrol: contempla la capacidad de la persona para el afrontamiento del estrés y de situaciones conflictivas, el equilibrio emocional, y la tolerancia a la frustración, a la ansiedad y al estrés.
  4. Autonomía: incluye la capacidad de la persona para tomar sus propias decisiones aplicando criterios propios, autorregulando la propia conducta y manteniendo un buen nivel de seguridad personal.
  5. Resolución de problemas y autoactualización: hace referencia a la capacidad de la persona para tomar decisiones e ir resolviendo los problemas que la vida conlleva, así como la capacidad para adaptarse a los cambios, desarrollando una actitud flexible y de crecimiento personal continuo.
  6. Habilidades de relación interpersonal: incluyen la capacidad de la persona para comunicarse y establecer relaciones interpersonales armoniosas con su entorno y la habilidad para comunicar sentimientos y dar y recibir afecto.

¿Cómo valorar si estamos bien?

El Modelo multifactorial de salud mental positiva se basa en que:

  • La salud mental positiva es un estado dinámico y fluctuante: unos días estamos más animados y nos sentimos mejor y otros días estamos más cansados y nos sentimos más desanimados.
  • La salud mental positiva engloba sentimientos, pensamientos y comportamientos positivos y negativos. En este sentido es igual de saludable reír y sentirse contento cuando están pasando cosas buenas que llorar y estar triste cuando se presentan problemas, pérdidas o decepciones.
  • La salud mental positiva tiene unos límites que hay que controlar. Todas las reacciones emocionales, todos los pensamientos y todos los comportamientos son sanos porque el ser humano está “fabricado” con un sistema emocional preparado para experimentar todo tipo de emociones y para generar todo tipo de interpretaciones y procesos cognitivos. Pero ¡cuidado! Todos los estados emocionales tienen unos límites que si se superan (sea por defecto o por exceso) pueden provocar patología. Los límites positivos, saludables o normales se desconocen.  Y, además, también se aplica la dificultad de establecer que es lo normal y lo anormal. Pero es importante conocer algunos criterios que todos podemos identificar que pueden ayudarnos a detectar cuando es necesario pedir ayuda.
  • Los criterios de carácter general que pueden ayudar a saber si una reacción, sentimiento, pensamiento o comportamiento es mentalmente saludable o bien hay que consultar a un profesional de la salud mental para pedir ayuda son: 
  1. La duración. Cuando una reacción o un sentimiento, especialmente de carácter negativo y bloqueante, se prolonga mucho en el tiempo, puede hacer pensar en que quizás algo no va bien.
  2. La intensidad. Cuando la intensidad de la respuesta lleva a la pérdida del control que la persona tiene sobre sus reacciones emocionales indica que algo no va bien.
  3. Un cambio en el patrón habitual de respuesta de la persona. Cuando la reacción o la respuesta emocional que tiene la persona es muy diferente de la forma habitual que tiene esa misma persona en responder, puede indicar que algo no va bien; en cambio en otras ocasiones, respuestas emocionales o comportamientos que pueden sorprender a la mayoría de personas, ya se han dado en otras ocasiones en la persona y forman parte de su patrón «habitual» de respuesta; en ese caso pueden ayudar a interpretar que, aunque pueda parecer extraña la reacción, todo parece que puede ir bien.
  4. La incapacidad. Si la reacción emocional nos impide seguir funcionando en nuestro día a día algo no va bien.
  5. Las consecuencias. Cuando la respuesta emocional o el comportamiento de la persona puede tener consecuencias negativas para sí mismo y/o para los demás, hay que valorar que quizás algo no va bien.

Desde esta perspectiva, la salud mental positiva se define de forma global como «un estado dinámico y fluctuante en el que la persona intenta sentir y estar lo mejor posible dentro de las circunstancias en las que se encuentre». Y de forma específica se define como «un estado en que la persona es capaz de mantener un cierto nivel de satisfacción personal consigo misma y con su vida, una cierta capacidad de aceptar a los demás y a los hechos diferenciales, un cierto grado de autocontrol emocional y de autonomía, es capaz de ir resolviendo los problemas que se le van presentando manteniendo una actitud de crecimiento y es capaz de establecer y mantener relaciones interpersonales satisfactorias».

Consejos para cuidar más nuestra salud mental positiva

Decálogo de recomendaciones generales y estrategias para potenciar la Salud Mental Positiva (Lluch, 2011).

Infografía salud mental positiva

 

Foto creada por katemangostar - www.freepik.es

Considero que he aprendido algo después de leer este contenido.
Mosaico de imágenes de adolescentes en entornos escolares, familiares y de ocio
¿Eres una persona resiliente?
Descubre cómo mejorar tu bienestar
Este contenido no sustituye la labor de los equipos profesionales de la salud. Si piensas que necesitas ayuda, consulta con tu profesional de referencia.
Publicación: 4 de Enero de 2021
Última modificación: 4 de Enero de 2021
M.Teresa Lluch

Dra. María Teresa Lluch Canut

Catedrática de Enfermería Psicosocial y Salud Mental. Facultat de Medicina i Ciències de la Salut
Universitat de Barcelona