¿Por qué los fármacos pueden ayudar a las personas con TDAH?
El TDAH es debido a un defecto de los neurotransmisores (dopamina y noradrenalina) que necesitamos para que funcionen de forma adecuada los circuitos cerebrales responsables de que podamos estar atentos, nos autocontrolemos y planifiquemos nuestras acciones.
De una forma sencilla, podemos decir que los medicamentos para el TDAH regulan los niveles de estos neurotransmisores y, por lo tanto, mejoran el funcionamiento de estas áreas cerebrales que se encuentran implicadas en el TDAH. Los fármacos ayudan a «rentabilizar» todo el esfuerzo que la persona afectada está haciendo cada día para superar sus dificultades y, además, mejora el pronóstico a largo plazo.